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Cultivar la vida offline o la vida de verdad

La vida offline, antes de que se siga convirtiendo en una forma en peligro de extinción, debemos mantenerla viva por la salud de nuestra mente

Al menos el 50% de los adolescentes se consideran adictos a la tecnología
Al menos el 50% de los adolescentes se consideran adictos a la tecnología

Sabemos que la tecnología tiene una gran capacidad de atracción en detrimento de la vida offline (o la vida de verdad). Y no sólo para los niños y adolescentes, sino también para los adultos. Y es que es muy probable que de lo primero que hagas al levantarte de la cama sea encender el teléfono móvil, la televisión, la radio, una tablet… para comenzar a estar conectado/a con el mundo. De la misma manera, lo último que haces antes de dormir sea también apagar el móvil.

Qué duda cabe que los dispositivos digitales se han apoderado de nuestra vida captando nuestra atención la mayor parte del tiempo. No obstante, y siendo esto una cuestión con grandes posibilidades a explotar, tiene otra cara que es la de la adicción.

Cada vez son más los jóvenes que pasan casi todo el tiempo usando Internet como único medio de ocio, pasando demasiadas horas en el mundo online y basando sus relaciones sociales en el contacto a través del mundo virtual.

Son cada ve más los jóvenes y no tan jóvenes que usan internet como única forma de ocio y de relacionarse con otras personas

Esto, a la larga, genera adicción, ya que nuestros cerebros no están preparados para la estimulación constante. Por ejemplo, sabemos que los cerebros adictos, pierden capacidad para generar dopamina, el neurotransmisor por excelencia involucrado en el circuito cerebral de recompensa. Dicho de otro modo, cuando el cerebro es adicto a algo, le cuesta sentirse reconfortado con otra cosa que no sea el objeto de adicción. Por eso cuando este no está disponible genera enfados, malestar, depresión y otros estados emocionales displacenteros.

También sabemos que la vida offline puede generar aburrimiento en algunos momentos, motor de la creatividad y el ingenio, así como de la inteligencia social. Así mismo, la neurociencia nos demuestra que el silencio es necesario para potenciar la paz interior y la calma.

Es por eso que debemos generar y promocionar hábitos de vida offline en casa para alejarnos de la adicción a la tecnología.

Si necesitas saber más sobre cómo cultivar hábitos saludables en torno a la tecnología, te animamos a que consultes con los mejores psicólogos que pueden ayudarte a ti y a los tuyos a superar la adicción a la tecnología.

Un comentario

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